¿Por qué los hombres buscan menos atención de salud mental?
El Día Mundial de la Salud Mental no es solo una fecha en el calendario para pasar por alto. Es un recordatorio anual de nuestra posición en cuanto a la priorización de la salud mental.
Sin embargo, el número de hombres que buscan ayuda profesional para gestionar su salud mental sigue siendo alarmantemente bajo, incluso a escala global. Un informe de The Telegraph en enero pasado señaló que el 80% de los suicidios fueron cometidos por hombres y que en 2020 solo el 15% de los hombres recibieron medicamentos psicotrópicos o terapia, en comparación con el 26% de las mujeres.
La razón, según Bryce Spencer-Jones, anfitrión del podcast Unstuck Yourself, es que los hombres han sido condicionados a internalizar sus sentimientos durante mucho tiempo, y ni siquiera saben por dónde empezar en su viaje de salud mental. “Muchos hombres solo quieren ser vistos y escuchados… Tienen tantas emociones guardadas, pero pueden no tener los recursos para saber por dónde empezar su sanación”, explica.
En resumen, en 2023, los hombres aún no acuden a terapia. Spencer-Jones, quien forma parte de un grupo de expertos que asisten a una iniciativa de la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de Harvard, y algunos otros ponentes opinan sobre el porqué.
¿Cuál es el problema que enfrentan los hombres para hablar de salud mental?
El mayor obstáculo para que los hombres busquen ayuda en cuestiones de salud mental, según todos los panelistas, es que a menudo ni siquiera pueden identificar sentimientos de ansiedad, depresión y otros trastornos mentales comunes.
Los hombres no saben lo que sienten
Ampliando el punto anterior, Kevin Simon, psiquiatra e instructor de la Facultad de Medicina de Harvard, dice: “Tengo un niño de 2 años y, a menudo, cuando los niños muestran emoción desde temprana edad, están entrenados socialmente para tratar de disminuirlo y no reconocer completamente cuáles son los sentimientos”.
Lo que quiere decir es que, como los hombres son enseñados a internalizar cualquier emoción que los haga parecer vulnerables, a menudo no pueden distinguir una de otra. Como lo expresa Spencer-Jones: muchos hombres “no saben lo que no saben”.
Los hombres no saben cómo buscar ayuda
En este sentido, la idea de que ir a terapia les ayudaría a desarrollar habilidades y herramientas para reconocer y enfrentar sus emociones es algo ajeno. Pero una gran parte de “desaprender” y romper el estigma social es darse cuenta de que un terapeuta puede ayudarte a identificar cómo te sientes y guiarte en consecuencia. No necesitas preparar un plan; solo sé abierto a buscar ayuda. Siempre es un buen momento para comenzar reconociendo simplemente que está bien no tenerlo todo resuelto.
¿Qué puede cambiar para que los hombres hablen más de salud mental?
Para poner de relieve el problema de la salud mental masculina, es urgente crear espacios seguros para que los hombres compartan sus problemas.
Martin Pierre, expresidente de la Asociación Psicológica de Massachusetts, insiste en la necesidad de crear espacios seguros para que los hombres hablen de sus problemas. Como demuestran demasiadas películas y series románticas, a los hombres les cuesta expresar sus sentimientos a sus otros amigos varones.
“La conexión permite a los hombres reconocer su propia humanidad. Los espacios seguros permiten a los hombres dar testimonio del dolor de los demás como una forma de interrogarse y afirmarse, y les permite ser vulnerables entre sí. Cuando revelas, sanas”, explica Pierre a Harvard Gazette.
Visibilidad de personas influyentes
Kalen Jackson, vicepresidente y propietario de los Indianapolis Colts y fundador de la iniciativa “Kicking the Stigma” [Patear el Estigma, en español] insiste en la importancia de que personas influyentes normalicen las conversaciones sobre la salud mental de los hombres. Para dejar claro su punto de vista, pidió a los miembros del popular equipo de fútbol americano de la NFL que expresaran sus luchas con la salud mental como deportistas.
“No hay mayor representación de la masculinidad en Estados Unidos que el fútbol americano. Poder romper esa barrera con nuestros jugadores, compartiendo cómo se sienten y sus emociones (…) darnos cuenta del impacto que podemos tener ha sido inspirador para nosotros”, afirma.
Uso de plataformas masivas
Parte de la iniciativa de Harvard consistía en conseguir que las personas influyentes interactuaran con destacados profesionales de la salud mental masculina y comprendieran, a través de ellos, cómo pueden ayudar a crear una cultura en la que los hombres se sientan seguros revelando sus batallas emocionales. Las 25 personas influyentes presentes en el acto tenían un alcance combinado de 20 millones de personas.
La idea, a través de estas diversas iniciativas, es muy clara: redefinir la propia definición de masculinidad.
Artículo publicado originalmente en GQ India.