Tu escritorio expresa más de tu persona que tú mismo
Todos necesitan un espacio para poner en práctica ideas, planes y acciones, cada individuo tiene una manera naturalmente especial de ser productivo.
A la hora de ejecutar una idea se persigue rendimiento, algunas veces perfección, optimización de tiempo y quizá algún tipo de distracción o estímulo.
Factores que influyen en el espacio de trabajo:
- Orden
- Colores
- Limpieza
- Iluminación
- Cantidad de elementos
- Entre otros.
Cada uno tiene su peculiaridad, según la personalidad se distinguen maneras de transmitir sus emociones y aportes a distintas ramas, así que basado en cómo luce su escritorio le invitamos a descubrir con quién de estos 7 genios se identifica y qué modelo es el que usted utiliza:
¿Qué tipo de genio podría ser?
1) Albert Einstein – Desorden creativo
Se caracteriza por tener montañas de documentos en el escritorio o encima del mobiliario que disponga. El interés principal es plasmar e ir desarrollando ideas en lugar de preocuparse por mantener el orden.
Algo muy importante es saber en dónde se ubica cierta información o dato que se ha plasmado en una de tantas hojas que decoran el escritorio, para algunas personas podría ser un problema, pero en realidad para quienes se identifiquen con ese tipo de genio saben que pueden encontrar lo que necesiten sin tanta preocupación, suelen saber en dónde exactamente está lo que precisan.
2) Marie Curie – Minimalista
Suelen tener las herramientas y componentes indispensables, perfectamente pensados para armonizar un espacio con el mínimo de elementos posibles. Regularmente escritorio no tiene sentido. Este modelo se resume en tener a mano lo menos posible para no caer en distracciones. No conciben desperdiciar espacios con elementos que no toman sentido y pueden quitar tiempo a la hora de trabajar. No hay tiempo para soñar despierto.
3) Mark Twain – La sala de juegos
Cuando la creatividad llega debe aprovecharla, son oportunidades potenciales para crear. Pero cuando se desvanece ese estallido de imaginación y fluidez creativa surgen los períodos de relajación en donde brotan pensamientos y reflexiones sobre qué hacer posteriormente. El área de trabajo tiende a estar llena de juegos para ocupar tiempo, distraerse un poco y estimular de nuevo esa carga de energía para crear.
4) Thomas Edison – El organizador
¿Cómo podría usted asumir tantas tareas diferentes y seguir teniendo éxito? Tu cerebro funciona mejor cuando colocas todo en categorías. Hay un lugar para todo, y nada debería estar fuera de lugar.
5) Nikola Tesla – Todo conectado.
Su oficina es central de control, conectada con todos y todo. Tienes una PC, una computadora portátil, una tableta, un teléfono inteligente, un Apple Watch … y quizás más de uno. También tienes todos los artilugios que los acompañan, por lo que puedes trabajar a la velocidad de la luz.
6) Roald Dahl –El jardín.
Para hacer su mejor trabajo, debe sentirse conectado con la naturaleza. Debe tener la vista de ventana y, si es posible, un escritorio para trabajar afuera cuando hace buen tiempo. Tu creatividad florece mejor cuando estás más cerca de las flores.
7) Darwin – Hogar dulce hogar.
Mientras que otros prosperan en una oficina ocupada, preferirías trabajar rodeado de objetos y personas que amas. Tienes tus mejores ideas después de una taza de café o, más tarde, un sorbo o dos de clarete. Has dominado la capacidad de trabajar y vivir con elegancia.